viernes, 31 de octubre de 2014

CDIPIC: ¿Quién juega con el hambre?

El pasado jueves los Carabobeños recibimos la nefasta visita del señor Diosdado Cabello, quien una vez más demostró todo su resentimiento al igual que el Gobernador del Estado Carabobo, pero además dejaron algunas frases que pueden ser objeto de análisis por lo descarada de las mismas.
El señor Diosdado señaló que “no se puede seguir jugando con el hambre del pueblo”, lo que resulta risible viniendo esa frase de una persona que ha estado al frente de un régimen que ha destrozado al aparato productivo del país y que ha propiciado una escasez sin precedentes, obligando a la masa clientelar que ellos llaman pueblo a realizar grandes colas y a tener que hacer magia para conseguir productos de primera necesidad.
De igual forma, es verdaderamente ridículo señalar que respetan el derecho al trabajo de los opositores pero no pueden ser jefes, porque este señalamiento viene de personajes que aplicaron la lista del despreciable Luis Tascón.
En ese sentido, al asegurar que los opositores no pueden ser jefes, es decir, ocupar cargos de dirección dentro del régimen, lo que hacen es garantizar el caos y la ineficiencia, no porque el conocimiento y la capacidad sea exclusivo de un determinado sector de la población, sino porque el ejercicio de la función pública por ordenes partidistas trae como consecuencia ineficiencia y corrupción, que es el pan de cada día de este país. La capacidad nunca ha sido exigida en la Administración Pública venezolana, sino una franela de un color, ese es nuestro drama.
Para finalizar, no se puede dejar de comentar lo burlesco que resulta el comentario de que “los que no tienen patria se alegran cuando el petróleo baja”, como si con ese tipo de frases resolverán el problema generado por el desastre de política petrolera del régimen. Años regalando el petróleo y ahora se quejan por la baja de precio, acaso un producto que se regala puede mantener su precio en el mercado. Que no te tomen desprevenido.
Por Wilfredo Feo Krischke

No hay comentarios: